Siglo XVIII. La historia contra Godoy

Manuel Godoy Álvarez de Faria nació en Castuera (Badajoz) en 1767. Sus padres procedían de la nobleza, pero de hacienda mediana. En 1784 llega a la Corte y es admitido por Carlos III. Tan solo 4 años después, Carlos IV le nombra Primer Ministro, esto después de otorgarle innumerable títulos y honores. ¿A qué se debió esta rápida ascensión. Unos dicen que la esposa e Carlos IV, la reina Mariah Luisa de Parma, cayó rendida a sus pies. Otros lo atribuyen a que sus antecesores, ministro Floriblanca y Aranda, no supieron manejar la situación ante la proclamación de la república en Francia por lo que le eligieron gracias a que estaba libre de influencias y relaciones con ambos. Se mostraba tradicional y antirrevolucionario en la política del Estado, aunque no contaba con la simpatía de los círculos de la ilustración española. El progreso de las reformas continuó. Tras la decapitación de Luis XVI, la guerra de la Convención se saldó con la Paz de Basilea y Godoy recibió el título de "Príncipe de la Paz".
Firma el Tratado de San Ildefonso con Francia provocando la ruptura con Gran Bretaña y la difícil alianza con Francia, el poco apoyo de España hacia Godoy junto con las guerras marítimas provocaron su caída en 1798.

Vuelve al poder en 1801 e intenta desligarse Francia pero la conspiración contra él por parte del partido de Fernando VII le hizo unirse con Francia de nuevo, lo que le trajo a la desdicha. Tras la conspiración se produjo el motín de Aranjuez (1808) y Carlos IV abdica el trono en su hijo Fernando. Después, acompañó a los reyes en su exilio y murió, en 1851, en París.

La historia se ensañó con Godoy, en especial por el origen de su rápida ascensión. Fue el último de los validos del antiguo régimen, con un poder superior a Lerma u Olivares. Su política exterior fracasó por los sucesos revolucionarios y la llegada de Napoleón.
Mantuvo a raya a la Inquisición, pero a veces se valió de ella para sus fines y autorizó la vuelta de los jesuitas. Fue también un gran mecenas, pero definitivamente la historia estuvo en su contra.